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6 regalos que nos gustaría recibir el Día de la Madre


6 regalos que nos gustaría recibir el Día de la Madre


Madre no hay más que una. Y no habrá vida para agradecerle todo lo que sigue haciendo por mí a pesar de que ya no soy una niña. Es increíble cómo sabe anticiparse a mis necesidades y que, sólo con mirarme, sepa cómo me encuentro. La pena es no decirle todos los días lo mucho que la quiero y lo que significa para mí. Sin duda, es un pilar fundamental en mi vida sin el cual todo habría sido mucho más difícil.

Y después de esta retahíla de sentimentalismo, me posiciono totalmente a favor del Día de la Madre. Porque aunque el cariño hay que demostrarlo todos los días, no está mal que haya una fecha en el calendario que nos recuerde la suerte que tenemos de tener a nuestro lado una mujer que haría lo que fuera por nosotros. Y qué mejor que demostrárselo con un regalo que, más que un regalo, sea una experiencia dónde ella se la única protagonista.

Las que tenemos hijos pequeños reconocemos que se nos cae la baba cuando llegan del cole con la manualidad que han fabricado especialmente para nosotras con sus propias manos: una tarjeta, un marco de fotos, un ramo de flores de papel… Son regalos que merecen la pena sólo por ver la carita de nuestros niños cuando nos los entregan.

Pero vayamos más allá. Queridos hijos y ‘padres colaboradores’, culminad la felicidad de la mujer que más queréis en el mundo con un regalo especial acorde con sus gustos o preferencias. Pensad un poco y no compréis a lo loco, y si andáis un poco perdidos en la vida, aquí os dejo una lista de 6 regalos que creo que a todas nos gustaría recibir el Día de la Madre y que se desmarcan un poco de lo habitual.

1.Tratamiento de belleza
Todos vivimos rodeados de centros de belleza que realizan múltiples tratamientos destinados a cualquier parte del cuerpo. Piensa en uno que le pueda interesar a ella: hidratante, regenerador, antioxidante, antiedad, antimanchas… Los centros especializados suelen ofrecer bonos-regalo para gastarlos en lo que más deseen.

2. Sesión de spa con masaje
Aquí no hay excusas económicas. Hoy en día son múltiples las ofertas que combinan sesión de spa con masaje, incluso, muchos centros añaden un té o un cóctel. Busca en tu ciudad centros de spa y darás con la oferta que más se adapte a tus posibilidades. Seguro que ella te agradecerá esa tarde de relax donde no tiene que preocuparse más que por disfrutar.

3. Tatuaje
A lo mejor llevamos tiempo escuchando a nuestra madre hablar sobre su deseo de hacerse un tatuaje que pueda o no estar relacionado con los hijos o la familia. Un dibujo, un símbolo, una letra… no puede haber nada más personal que un tatuaje. Busca un centro de confianza y pídele cita, ¡a todos nos han recomendado alguno! Acompáñala para que se sienta más segura en caso de que sea la primera vez, ¡y paga la cuenta!

4. Una caja sorpresa con su comida preferida
Todas tenemos preferencia por algún tipo de comida que no solemos comer muy a menudo por múltiples factores: no la tenemos a nuestro alcance, no es muy sana que digamos, tiene muchísimas calorías o sube de forma desmesurada la cuenta en el súper. Ahora es el momento de darle ese capricho. Prepárale una caja bonita con esos productos por los que suspira pero que no come normalmente. Chocolates, dulces, un postre, snack, comida  típica de otro país que le apasione o incluso ese cava que sólo toma una vez cada cinco años. Si adornas la caja con un lazo y le pones alguna tarjeta con dedicatoria, triunfarás seguro.

5. Una tarjeta regalo para gastar en su tienda favorita
Todas tenemos una tienda en la podríamos pasar las horas muertas sólo ojeando sus artículos o productos. Ya sea una tienda de ropa, una librería, una perfumería, una tienda de decoración, de electrónica… La mayoría de ellas ya disponen de tarjetas regalo para gastar en el propio establecimiento. Tú elige la cantidad y tu madre hará el resto.

6. Una entrada para el concierto del cantante de su vida
Resulta que este año su cantante favorito visita su ciudad. En Internet puedes enterarte si visitas cualquier página web de conciertos. Si estás de suerte, compra un par de entradas  para que puedas acompañarla. Seguro que pasareis un buen rato y ella te lo agradecerá eternamente.


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