Ir al contenido principal

Baños múltiples: del spa al túnel de lavado

En las familias grandes, la felicidad se multiplica, la vida se complica y el tiempo que antes dedicabas a un solo hijo se divide en tres. ¿Y cuál es la diferencia entre bañar a un niño y bañar a tres? Pues que la hora relajante del baño tipo spa, de larga duración, con agradable espumita y todos los juguetes para uno solo, se convierte en un túnel de lavado rápido con corrientes de agua, pies y manos salpicando y una cesta de juguetes que luego tardamos media hora en recoger.

Baña a uno, baña a dos y baña a tres. ¿Baño relajante? Ja, ‘muertecica’ termino. Y teniendo en cuenta que ya es el final del día y las fuerzas van desapareciendo, esta tarea se hace a veces muy cuesta arriba. Pero no creáis, que esto también tiene sus ventajas. Ahora que las niñas están más grandes ya se bañan en la bañera con sus sillitas. Ya hemos abandonado nuestra bañera Jané con cambiador, aunque aún no la hemos desterrado, el cambiador sigue siendo súper práctico y la bandeja de abajo está a tope de cosas (cremas, gasas, gel, pañales, toallitas…) todavía no sé ni dónde voy a meter todo eso cuando quitemos la bañera definitivamente.

Por cierto, ¿habéis probado las sillitas de baño? Es otro de mis imprescindibles para bebés, a mí me fue genial con Alfonso. Se adhieren con ventosas a la bañera y son muy seguras para cuando los niños ya se quedan sentados. Además, suelen llevar juguetes incorporados y como están libres de pies y manos pueden chapotear a su aire.

Volviendo a las ventajas de bañarlos a todos a la vez, otra de ellas es que me permite concentrar a todo el personal en el mismo sitio, ya que Alfonso casi siempre quiere meterse con sus hermanas. Y la verdad es que se lo pasan súper bien. Además, ese ratillo que están juntos y controlados me da un poco de autonomía para, por ejemplo, doblar una cesta de calcetines o colocar la ropa en el armario. Qué le vamos a hacer, hay que aprovechar cada minuto si una quiere tener la casa medio decente.

No sé si a vosotras os pasa, pero hay que ver la capacidad de organización y decisión que me está dando la maternidad múltiple. Sí, eso de hacer las tareas bajo la presión de que las niñas se van a poner a llorar de un momento a otro o aprovechar los ratitos que duermen para ir haciendo cosillas. Vamos, que a mí ahora me das una hora sin niños en casa y la limpio a fondo de arriba abajo con pintura de paredes incluida. Y antes, con todo el tiempo del mundo, no era capaz de hacer ni la mitad de lo que hago ahora. ¿A vosotras también os pasa?

Y bueno, las desventajas de bañar a tres al mismo tiempo son claras: una horita buena de trabajo que no me quita nadie con niños llorando porque no se quieren salir de la bañera y porque ya están cansados de todo el día. Por no hablar del vapor que se concentra en el baño, con el que podrían circular diez locomotoras antiguas. Por supuesto que ya me he olvidado de llevar un pelo sedoso y sin encrespar. Eso sí, los poros de la piel se abren que da gusto, así que después de bañarlos es el momento de ponerme una tira en la nariz de esas que quitan los puntos negros.


Y vosotras, ¿bañáis a los niños al mismo tiempo? Seguro que os pasan miles de anécdotas.

Comentarios

Entradas populares de este blog

El Valle de Lecrín con niños: la Ruta del Azahar

La primavera es sin duda la mejor estación del año para visitar El Valle de Lecrín. Para los que aún no tengan el privilegio de conocer esta zona, decir que El Valle de Lecrín es una comarca situada al sur de Granada y compuesta por un total de 17 pueblos repartidos en 8 municipios. En esta ocasión, me voy a centrar en el municipio de El Valle que dicho sea de paso es mi pueblo y que está compuesto por los núcleos de Melegís, Restábal y Saleres. En primavera, El Valle luce en todo su esplendor por tres motivos: el microclima especial que posee al estar situado en un valle, el paisaje con todos sus naranjos en flor y el olor que desprende el azahar y que embriaga a todo el que lo visita. Yo siempre digo además que los que vivimos en El Valle tenemos una situación privilegiada porque nos encontramos a media hora de Granada Capital y de la Costa Tropical, y a una hora aproximadamente de Sierra Nevada. Por este motivo son cada vez más las familias de Granada y del Área Metropolitan

El Valle de Lecrín con niños: el merendero de Béznar

Merendero de Béznar con columpios, mesas y barbacoas Aunque vivo en El Valle de Lecrín desde que nací, he de reconocer que todavía hay rincones de la comarca que aún no conozco. Son tantos sus recursos naturales y de esparcimiento que no dejo de descubrir cosas nuevas. El periodo de ‘descanso’ que me he tomado en el trabajo tras mi reciente maternidad múltiple me está permitiendo, paradójicamente, andurrear más con la familia el fin de semana buscando siempre esos componentes para que podamos disfrutar todos y, sobre todo, los niños.    

Ideas caseras para un bautizo

El pasado fin de semana celebramos el bautizo de las mellizas. Un bautizo singular ya de por sí, donde había dos niñas, dos madrinas y dos padrinos. Sin duda, una ocasión muy especial para toda la familia que quise completar con detalles muy originales y caseros.  ¿Os acordáis de las más de 40 latas de leche vacías que guardaba de las mellizas? Pues ya les he dado uso. Y lo estaba deseando porque me estaban invadiendo, literalmente. Tras pensar varias veces lo qué podía hacer con ellas, se me ocurrió la idea de convertirlas en el recordatorio del bautizo. Redecorar las latas no ha sido tarea fácil, ni rápida, y más cuando el tiempo libre escasea por esta zona. Pero me apetecía mucho hacerlo y por suerte he podido contar con la ayuda del papá y de las abuelas, que me han echado una mano. Busqué un papel pintado que fuera adhesivo y una cenefa de encaje. Ahora, como el tema de las manualidades está tan de moda, existe muchísima variedad de artículos, de todas las formas,